Hace unas semanas abrieron en nuestro barrio, en Móstoles (Madrid), una pizzería. Nada más ver el cartel, nos dijimos: "tenemos que probarlo". Para nosotros es difícil que una pizza supere a las de Domino's (cuestión de gustos), pero las pizzas de aquí no tienen nada que ver.
El lema de esta franquicia que nació en Madrid es "la pizza que recordabas", y la verdad es que lo cumple. Las pizzas están tremendas, muy frescas, con ingredientes del día y con queso del que estiras y se alarga. Tienen pequeñas, medianas y familiares. Y las familiares son una bestialidad, de una comen 4 personas, o más, con mucha hambre.
Tienen diferentes especialidades, pero encontramos ingredientes de los que quizá abusen un poco, como es la cebolla. Y es que si te pides una especialidad que contenga cebolla, suele tener mucha. Habrá gente a quien le guste o incluso le encante, pero a nosotros no, principalmente porque tiende a repetir después.
Una de las especialidades que más nos han gustado han sido las calzone, que te puedes pedir igual que si fuera una pizza normal, es decir, puedes pedirte una especialidad o bien elegir tú mismo los ingredientes. Como ingredientes curiosos, disponen de salchichas y patatas fritas. Sí, patatas fritas como ingrediente de una pizza.
Por otro lado, aparte de pizzas, también disponen de entrantes/complementos, pastas, ensaladas y helados. De entrantes ya hemos probado los palitos de mozzarella y las croquetas. Los primeros tienen un grueso rebozado de pan con ajo y perejil, lo que le da un sabor un poco fuerte, quizás en parte para contrarrestar el sabor algo soso del queso. Las croquetas no son nada del otro mundo, se notan que son ultracongeladas (imaginamos que al igual que todos los otros complementos: nuggets, bolitas de pollo, alitas...).
Fingers de mozzarella y croquetas |
De postres y bebidas, no hay nada que resaltar, a excepción de la jarra de cerveza que te la sirven con la jarra recién salida del congelador y servida bien fría de grifo. De esas que cuando aprieta el calor entran como agua. El resto de bebidas son refrescos de lata (Pepsi, Lipton, Kas y 7up) al igual que la cerveza más barata y la sin alcohol. Luego está copa de cerveza, jarra de cerveza, agua mineral de medio litro y litro y medio (desconozco la marca, por eso nunca la hemos pedido), y vino lambrusco rosado o tinto. Los postres se componen sólo de helados: hay tarrinas de Ben&Jerry's y de Carte D'Or, mini Magnums y tarta helada de láminas. La verdad es que algún postre que no sea helado se echa en falta, pero es posible que amplien los postres ya que, recordamos, acaban de abrir.
Nosotros estuvimos en el restaurante de la Calle Andrómeda, en el PAU de Móstoles, donde a través de los cristales puedes ver cómo elaboran las pizzas. El interior es diáfano, espacioso y algo desangelado, pues no hay nada de decoración, suponemos porque acaban de abrir. Además la música, una emisora de radio conocida, estaba a un volumen no muy alto pero audible, lo cual es de agradecer. Como punto positivo, la entrada, el aseo de mujeres y el local en sí está totalmente habilitado para personas con movilidad reducida.
Los precios rondan entre los 10-15€ las pizzas, los complementos 3€ (un complemento es para dos personas), las pastas 5€ y los helados entre 3 y 6€. Al igual que las pizzas, el precio varía según el tamaño. Pero suelen disponer de ofertas y menús que salen rentables, sobre todo si es un grupo grande, o dos personas muertas de hambre. Y como cualquier pizzería, disponen de servicio a domicilio, local y recoger.
Para saber más información se puede visitar su web donde están todos los ingredientes, la carta, localizador de restaurantes, etc.
Nosotros estuvimos en el restaurante de la Calle Andrómeda, en el PAU de Móstoles, donde a través de los cristales puedes ver cómo elaboran las pizzas. El interior es diáfano, espacioso y algo desangelado, pues no hay nada de decoración, suponemos porque acaban de abrir. Además la música, una emisora de radio conocida, estaba a un volumen no muy alto pero audible, lo cual es de agradecer. Como punto positivo, la entrada, el aseo de mujeres y el local en sí está totalmente habilitado para personas con movilidad reducida.
Los precios rondan entre los 10-15€ las pizzas, los complementos 3€ (un complemento es para dos personas), las pastas 5€ y los helados entre 3 y 6€. Al igual que las pizzas, el precio varía según el tamaño. Pero suelen disponer de ofertas y menús que salen rentables, sobre todo si es un grupo grande, o dos personas muertas de hambre. Y como cualquier pizzería, disponen de servicio a domicilio, local y recoger.
Para saber más información se puede visitar su web donde están todos los ingredientes, la carta, localizador de restaurantes, etc.